Joyería Javier de Laguno : LA IMAGEN ESPACIAL DE LA JOYERÍA JAVIER DE LAGUNO

La Joyería Javier de Laguno fue abierta al público el dos de octubre de 1971, aunque más orientada a la relojería que a la joyería, pues su fundador, D. Javier de Laguno Zuzuarregui, era relojero, de profesión y de oficio, por lo tanto, cuando el negocio abrió sus puertas al público, lo hizo con el nombre de

TÉCNICA RELOJERA JOYERÍA
JAVIER DE LAGUNO

y la fachada de la joyería, es decir, la primera imagen que el malagueño tuvo de este nuevo punto de referencia en el panorama relojero-joyero de la ciudad de Málaga fue el siguiente:

Esa fotografía no es del año 1792, pero salvo la vitrina de la derecha, es igual a como era cuando se abrió.

Cuando se abrió al público, esa vitrina de la derecha era, en realidad un óvalo de aproximadamente 1,10 metros de largo por unos 0,70 metros de alto y unos 0,25 metros de fondo y servía para exponer relojes de pulsera. Sería en 1976 cuando se acometió la que sería la primera reforma del negocio, cuando se sustituyó dicho óvalo por la vitrina que se aprecia en la foto.

1976. Detalle del papel que decoraba la pared, así como dos de las vitrinas expositivas.

Señora leyendo el periódico.

Aunque en la foto no se aprecia bien, el escaparate de la izquierda tenía en su parte superior e inferior unas placas de metal, de aluminio, enmarcándolo, al igual que el escaparate de la derecha. Bien, pues la segunda reforma fue cuando se cambiaron esos marcos de aluminio por otros de latón dorado.

En septiembre de 1978 pasó a ocupar la dirección del negocio D. César de Laguno Oviedo, hijo de D. Javier, y actual propietario, el cual en 1989 llevó a cabo una nueva reforma, en la cual se cambió la fachada de la joyería, la solería, tanto de la entrada como del interior y elementos del mobiliario fijo del interior, sobre todo del fondo de la joyería, pues se eliminó un mueble que tapaba la tienda de la trastienda, ganando, así, espacio útil el negocio. También se añadieron algunos muebles más adosados a las paredes y la puerta de acceso al negocio, que de ser de cristal pasó a ser de madera con cristales.

Así mismo, también se cambió el papel que empapelaba las paredes.

Así quedó la la fachada tras su reforma:

Imagen del escaparate, que como se ve, quedó igual:

En el interior, como se ha dicho se añadieron algunos muebles, adosándolos a la pared:

Y ya, por último, en febrero de 2007 se acometió la última reforma, consistiendo esta en echar abajo por completo el negocio y hacerlo de nuevo, pero con un concepto totalmente nuevo y totalmente diseñado por su actual propietario, D. César de Laguno Oviedo.